¿Necesito brackets? Cuándo saber

Dientes torcidos o apiñados

Una de las señales más obvias de que podría necesitar brackets son los dientes torcidos o apiñados. Esto puede ocurrir cuando no hay suficiente espacio en la boca para que los dientes crezcan adecuadamente, lo que hace que se superpongan o se tuerzan. Los dientes apiñados pueden ser difíciles de limpiar, lo que genera un mayor riesgo de caries y enfermedades de las encías.

Sobremordida

Una sobremordida se produce cuando los dientes frontales superiores se superponen significativamente con los dientes frontales inferiores. Si bien una ligera superposición es normal, una sobremordida grave puede causar problemas al masticar y hablar, y puede provocar un desgaste desigual de los dientes. En algunos casos, también puede causar dolor en la mandíbula y otros problemas dentales.

Submordida

Una mordida inferior ocurre cuando los dientes inferiores sobresalen de los dientes superiores. Esto puede dificultar la masticación adecuada y causar problemas del habla. Una mordida inferior también puede provocar un mayor desgaste de los dientes y las articulaciones de la mandíbula, lo que podría provocar molestias o dolor.

Mordida cruzada

Una mordida cruzada es cuando los dientes superiores no se alinean correctamente con los inferiores, ya sea en la parte frontal o posterior de la boca. Esta desalineación puede causar problemas al morder y masticar, y puede provocar un crecimiento asimétrico de la mandíbula si no se corrige.

Mordida abierta

Una mordida abierta ocurre cuando los dientes superiores e inferiores no se tocan cuando la boca está cerrada, creando un espacio. Esto puede deberse a hábitos como chuparse el dedo o sacarse la lengua. Una mordida abierta puede causar dificultades para masticar y hablar y puede afectar la función general de la boca.

Espacios entre los dientes

Si bien algunas personas tienen naturalmente espacios entre los dientes, los espacios importantes pueden ser problemáticos. Estos espacios pueden deberse a la falta de dientes, dientes de tamaño insuficiente o un patrón de crecimiento anormal de la mandíbula y pueden afectar la estética de su sonrisa y dificultar la masticación efectiva de los alimentos.

Dolor o malestar en la mandíbula

El dolor o malestar crónico en la mandíbula, incluidos chasquidos o chasquidos al mover la mandíbula, pueden ser un signo de una mordida desalineada u otros problemas de ortodoncia. Este dolor puede ser un síntoma de trastorno de la articulación temporomandibular (ATM), que puede aliviarse con un tratamiento de ortodoncia.

Dificultad para masticar o morder

Si tiene dificultades para masticar o morder alimentos, podría deberse a dientes desalineados o problemas con la mandíbula. Esto no sólo afecta su capacidad para comer cómodamente, sino que también puede afectar su digestión y su salud en general.

Salud bucal mejorada

Los brackets ayudan a alinear los dientes correctamente, haciéndolos más fáciles de limpiar. Esto puede reducir el riesgo de caries, enfermedades de las encías y otros problemas de salud bucal. Los dientes rectos son más fáciles de cepillar y usar hilo dental de manera efectiva, lo que promueve una mejor higiene bucal.

Apariencia mejorada

Uno de los beneficios más importantes de los brackets es la mejora en el aspecto de tu sonrisa. Los dientes rectos y bien alineados pueden aumentar su confianza y autoestima, lo que lleva a una imagen más positiva de sí mismo.

Mejor funcionalidad

Los frenillos corrigen los problemas de mordida, lo que facilita masticar y hablar. Esto puede mejorar su calidad de vida en general, haciendo que las actividades cotidianas sean más cómodas y placenteras.

Prevención de futuros problemas dentales

El tratamiento de ortodoncia puede prevenir que se desarrollen problemas dentales más graves en el futuro. Por ejemplo, corregir una mordida desalineada puede prevenir el desgaste excesivo de ciertos dientes, reduciendo el riesgo de daño y pérdida de dientes.

Habla mejorada

Los dientes o las mandíbulas desalineados pueden provocar impedimentos en el habla. Al alinear los dientes correctamente, los frenillos pueden ayudar a mejorar la claridad del habla y reducir cualquier dificultad relacionada con la pronunciación.

Consideraciones de edad

El tratamiento de ortodoncia puede ser eficaz a cualquier edad, pero existen momentos óptimos para iniciarlo. Para los niños, se recomienda someterse a una evaluación de ortodoncia antes de los 7 años. Esta evaluación temprana puede identificar problemas potenciales y determinar el mejor momento para comenzar el tratamiento. Para los adultos, nunca es demasiado tarde para buscar atención de ortodoncia, ya que las técnicas modernas hacen que los frenillos sean más accesibles y efectivos para todas las edades.

Autoevaluación

Si nota alguno de los signos mencionados anteriormente, podría ser el momento de considerar una evaluación de ortodoncia. Los chequeos dentales regulares son esenciales y su dentista a menudo puede detectar signos tempranos de problemas de ortodoncia y derivarlo a un especialista.

Evaluación profesional

Un ortodoncista es un especialista dental que diagnostica, previene y trata las irregularidades dentales y faciales. Durante una evaluación, el ortodoncista realizará un examen exhaustivo, que incluye radiografías, fotografías e impresiones de sus dientes, para determinar si son necesarios brackets.

Consulta inicial

La consulta inicial implica un examen detallado de los dientes y la mordida. El ortodoncista analizará tus inquietudes, realizará pruebas diagnósticas y creará un plan de tratamiento personalizado en función de tus necesidades.

Opciones de tratamiento

Hay varios tipos de brackets disponibles, cada uno con sus ventajas. Los brackets metálicos tradicionales son los más comunes y eficaces para los casos graves. Los frenillos de cerámica son menos notorios, mientras que los brackets linguales se colocan en la parte posterior de los dientes. Los alineadores transparentes, como Invisalign, son una opción popular para quienes buscan una opción más discreta.

Duración del tratamiento

La duración del tratamiento de ortodoncia varía dependiendo de la complejidad del caso. En promedio, el tratamiento con brackets dura entre 18 meses y 3 años. Su ortodoncista le proporcionará un cronograma estimado durante su consulta inicial.

Ajustes y chequeos

Se necesitan citas periódicas para ajustar los aparatos ortopédicos y controlar el progreso. Estas visitas suelen ocurrir cada 4 a 8 semanas. Los ajustes implican apretar los aparatos ortopédicos para garantizar que los dientes continúen moviéndose a la posición deseada.

Atención posterior al tratamiento

Una vez que se retiran los frenillos, generalmente se requieren retenedores para mantener la nueva alineación de los dientes. Los retenedores evitan que los dientes vuelvan a su posición original y generalmente se usan por la noche.